¿A nivel personal te gustaría tener la oportunidad de ir a jugar al exterior y vivir del deporte?
Siendo más chica se me presentó la oportunidad de irme a jugar a Estados Unidos, a una Universidad y hacer una carrera allá. Yo siempre tuve ese desafío y esas ganas de vivir esa experiencia de jugar en el exterior, no solo por el nivel de competencia sino por tener la posibilidad de vivir del hockey. Acá cualquiera de las Cimarronas trabaja, estudia y después se va a entrenar con la Selección. Digamos que lo tengo en mi lista de pendientes, me gustaría vivir del hockey y tener esa experiencia, pero primero quiero terminar la carrera acá y después veremos.
¿Qué se siente jugar en las Cimarronas?
Jugar en la Selección es un verdadero orgullo. Estando en la situación que estamos, sabiendo que es un deporte amateur, hacemos un esfuerzo enorme y dejamos todo. El equipo te hace sentir muy importante tengas el rol que tengas dentro del plantel, y la verdad es que en la parte de entrenamientos y en los partidos el nivel es muy bueno.
¿Cómo te definís como jugadora?
Juego de 5, ahí en la mitad de la cancha. Me caracterizo por distribuir el juego y si bien soy un poco más ofensiva que defensiva me gusta tener un gran recorrido, bajar, subir, estar en todos lados. Soy una persona optimista, no solo como jugadora, sino en la vida. Salgo fácil del error y logro ser bastante estable en los partidos.
¿Tenés algún Campeonato que recuerdes especialmente con Old Girls?
Te diría el del 2015, cuando salimos Campeonas. Ese año fue muy especial, las semis que ganamos por penales, la final que también ganamos por penales. Son momentos que hoy, mirando hacia atrás, te das cuenta de todo lo que se fue dando para llegar a lograr el objetivo.
Recuerdo especialmente aquella semifinal contra Old Christians de ese 2015. Íbamos perdiendo 3 a 1 y faltaba muy poco para terminar el partido. Había algunas de las chicas que estaban resignadas, e incluso recuerdo que ellas tuvieron un penal para despegarse y liquidar el partido. Lo erraron y ahí surgió una rebeldía increíble, empezamos a convencernos de que no estaba terminado, de que todavía podíamos. Conseguimos el 3-2, conseguimos el empate 3-3 y en los penales sabíamos que no se nos podía escapar. Lo ganamos y pasamos a la final. Aquel partido lo recuerdo especialmente.
¿Qué es lo que más se ha extrañado del club en este tiempo?
Creo que a todas nos ha pasado lo mismo, el extrañar el contacto diario con las chicas. Nos veíamos tres veces por semana en los entrenamientos, los terceros tiempos. Y por supuesto que extraño también los partidos, más que las prácticas. Esas ganas de competir no me las puedo quitar █